Mejor arriesgarse que perder la verdad

La voluntad de creer .
Nos damos cuenta con el trascurso de los años que tomamos decisiones por lo creemos (sea falso o verdadero)tenemos distintas hipótesis que nos guían para elegir nuestra creencia (vivas , muertas, forzosas , evitables , transcendentales o triviales) desde elige entre ala o dios hasta quiere venirse conmigo a dar una vuelta al mundo , son opciones que por nuestras creencias definiremos como anteriormente he mencionado , pero claro  no es lo mismo que le pregunten a un ateo si prefiere ala o dios , que a un católico .Esta claro que nuestra situación es crucial para nuestra decisión y como la definiríamos.
Claro todos en nuestra vida no solemos toparnos con decisiones como irnos a dar una vuelta al mundo pero si nos podemos topar con situaciones que nos haga prejuzgar a alguien , incluso tacharlo de algo que no tenemos pruebas , pero claro somos humanos y podemos caer en el error , aunque ahi veces que el error es mentira y simplemente queremos deshacernos de esa persona , podemos creer que por tener algo somos mejores , pero inconscientemente somos igual que cuando no lo teníamos.
La fe tenemos la obligacion o voluntad de creer , pues no es lo mismo en una familia islamista que una catolica , solo dejo esta pregunta ¿la fe es voluntaria o obligada? ¿podrian  nuestros padres ser cristianos y nosotros decidir nuestra religion ?
Pues no simplemente la fe religiosa es un obligacion , por el simple motivo de cuando tienes 1 año te bautizan a los 10 te tomas el cuerpo de cristo .... ¿cuantos ateos fueron obligados a tener un bautizo ? ¿cuantos niños de verdad quieren una comunion por su fe católica? solo es un juego consumista , somos tan crédulos como consumistas , solamente hacemos las cosas que los demás hacen y siempre superando a los demás materialmente no mentalmente.
Claro que hay veces en la vida que recapacitamos y creemos a quien nuestro corazón y la razón dice aunque todo este contra nuestra, pues la pasión y nuestra naturaleza pasional va en contra aveces de la razón.
Manuel Ortega Martìnez